Hola! os cuento la primera vez que he usado la soja texturizada fina como aporte de proteínas y sustituto de la carne picada en mi dieta. Esta semana he decidido no comer carne a ver que tal me va. Voy a experimentar mis sensaciones y pensamientos sin carne. ¿Pensamientos? Sí, pensamientos. Lo que comemos nos influye en todos los aspectos de nuestra vida, de nuestro organismo. Como se cita en el libro "El poder curativo de la naturaleza":
Los antiguos atenienses se fueron haciendo sabios y fuertes intelectualmente gracias a la simple dieta que les proporcionaba el mar Mediterráneo, las montañas de Grecia y los suaves pastos de su tierra natal. Los esquimales se alimentaban con la grasa de las focas y las morsas, y mantienen una actitud serena. Los habitantes de las soleadas regiones meridionales subsisten a base de naranjas, frutos del árbol del pan, bananas, peces de río y de mar; y sabemos que desarrollan leves trastornos mentales.
Doctor Selden H. Taalcott, Nueva York, 1888.
Retomando el tema principal, la soja texturizada, os comento la receta que he hecho y cómo he llegado a ella.
En las vacaciones de verano estuvimos en San José, en el Cabo de Gata (Almería). Una de las noches cenamos en un restaurante vegetariano que se llama El jardín, en el puerto deportivo, donde probamos la lasaña boloñesa vegetariana que llevaba soja texturizada.
Otro plato inspirador de mi receta es algo que me encanta y que cuando estuve en Roma no dudé en pedir, la parmigiana di melanzane (berenjenas a la parmesana)
Uniendo ambas ideas, la boloñesa y la parmigiana, cogí del frigo 2 berenjenas y 1 calabacín, los corté longitudinalmente y los pasé por la plancha. En un bowl puse la cantidad deseada de soja texturizada con el doble de agua para hidratarla durante 10 minutos. Piqué cebolla y pimiento para hacer un sofrito donde echar después la soja texturizada. A la cebolla, pimientos y soja juntos le añadí un vasito de vino blanco y dejé que se evaporara, después le añadí una lata de tomate triturado y especias (orégano, pimienta, comino y tomillo) al gusto y lo dejé hacerse a fuego medio.
Con el horno precalentado, preparé en una fuente una base de berenjena y le puse por encima la boloñesa de soja, otra capa de berenjenas y calabacines, boloñesa y una última capa de berenjenas acabando con queso rallado. Lo metí al horno hasta que estuvo fundido y un poco dorado.
Resultado:
Fin.