domingo, 18 de octubre de 2015

Finde de sierra y setas

Hola!! Este puente nos hemos cogido unos días de descanso y nos hemos ido a la sierra, nuestro remanso de paz. Esta vez hemos estado en Fuenteheridos, en el mismo pueblo, en unos apartamentos rurales de la casa la Revuelta. Muy recomendable.
http://fuenteheridos.weebly.com/

El senderismo es una actividad que aprovechamos para hacer cada vez que podemos, pero en la sierra están los paisajes que más nos gustan. El primer día de nuestras minivacaciones elegimos el sendero de Galazora al Castaño llamado Ribera de Jabugo. Este sendero transcurre al lado del río Múrtiga, lo que le da esa sensación de humedad que nos hizo pensar que podríamos encontrar setas. Craso error, no encontramos nada. De allí sólo nos llevamos castañas y nueces (que nunca había visto al natural, urbanita que es una).




Este sendero está señalizado y podéis encontrar información sobre él en la página de la junta
http://www.juntadeandalucia.es/medioambiente/servtc5/ventana/mostrarFicha.do;jsessionid=E4C703786149C4DD375813F883A5D6B2?idEquipamiento=19891

Cuando llegamos al Castaño nos tomamos algo en la plaza del ayuntamiento, siempre al fresco porque nos acompaña nuestro mejor amigo peludo. Retomamos nuestro camino intentando encontrar el camino antiguo del Castaño a Galaroza del que nos habían hablado en otra ocasión los lugareños y de nuevo no lo encontramos. Resulta que es un camino no señalizado. Si alguien lo conoce, por favor, no dudéis en escribir, ya por curiosidad.

El segundo día cambiamos de pueblo, queríamos llegar a Alájar. Nuestra intención era salir desde Fuenteheridos hasta Alájar, lo que se vio truncado porque el sendero que teníamos en mente no está señalizado y no supimos dónde comenzarlo, por lo que decidimos hacer uno conocido: Alájar-Linares de la Sierra.
http://www.juntadeandalucia.es/medioambiente/servtc5/ventana/mostrarFicha.do?idEquipamiento=19865

Seguimos en la búsqueda de las tanas. nos metemos por zonas difíciles de acceder y donde nos pinchamos con los rosales y las zarzas, pero no hay señales de setas, ni una tóxica.


Paramos un rato para comer en Linares en el bar Riandero, en la plaza que es como una plaza de toros. Recomendación: croquetas de setas.
Seguimos nuestro camino y vemos que en esta misma plaza hay un punto de información, muy interesante dado que los senderos sin señalizar se nos resisten. Desde Linares salen varios y los podéis encontrar en la siguiente página:
http://www.linaresdelasierra.com/

Decidimos hacer el sendero rutas del agua y seguimos por el camino del manantial del tío Cano, donde vimos 2 ciervos a poca distancia, una experiencia preciosa. Seguimos sin ver setas.




Al día siguiente y ya el último, decidimos empezar un sendero desde nuestro pueblo base, Fuenteheridos. Sabíamos a ciencia cierta que en la entrada del pueblo salía uno hacia Aracena y que en el aparcamiento había indicaciones hacia Cortelazor. Bajamos a la entrada del pueblo y el primero que vimos fue el de Cortelazor, 6 km de sendero sin señalizar. Con esperanza me llevé mi cesta aunque mi pareja me preguntaba por qué la había cogido si no habíamos tenido suerte antes.

Anduvimos un rato hasta que a pocos metros vimos en el tronco de un árbol unos capuchones de tono anaranjado y decidimos campear. Nos acercamos y no eran tanas, pero, al ladito y de un naranja brillante encontramos nuestra primera tana. Seguimos buscando por la zona pero no encontramos más, de momento. Un poco más adelante volvimos a dejar el camino y encontramos varias tanas más, siempre cerquita de los castaños asomándose tímidamente entre las hojas. Recolectamos un total de 7, pero para nosotros como si fueran 7 kilos.



Volvimos a Fuenteheridos para almorzar como unos héroes y nos dimos el homenaje en un bar de la plaza del pueblo que creo que se llamaba brasería la taberna. Lo podéis encontrar justo al lado de una casa llena de flores, en la calle la fuente. Allí probamos el picadillo árabe y el solomillo en salsa de setas que estaban exquisitos.

Después de comer recogimos nuestras cosas y volvimos a la vida real.